Libro de la UAM captura 40 años de crisis y avances económicos de América Latina y el Caribe

En la década de 1980 México vivió una gran recesión que provocó una importante caída del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que en el resto de América Latina el desarrollo económico crecía con lentitud hasta la recesión de 2009, señaló Fernando de Mateo y Venturini, representante de México ante la Organización Mundial de Comercio, durante la presentación del libro Comercio y desarrollo de América Latina y el Caribe 1980-2020, editado por la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

El crecimiento externo en 1980 tomó relevancia en la región y varios países iniciaron procesos de apertura comercial y financiera para insertarse en la globalización. Los esfuerzos de integración económica se remontan a principios de los años 60 del siglo pasado, cuando México se unió a la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio (ALALC), tratado que establecía una zona de libre comercio entre países de América Latina.

México tiene una serie de esquemas que le permiten hacer importaciones de otras naciones con aranceles reducidos. Hoy en día China se considera el gran motor del crecimiento mundial, y México exporta a ese país diez mil millones de dólares e importa 110 mil millones de dólares, explicó de Mateo y Venturini.

El doctor Daniel Jaime Camacho, profesor del Departamento de Economía de la Unidad Azcapotzalco de la UAM, sostuvo que la publicación hace énfasis en los aspectos de la historia económica, en los que destaca los logros en materia de desarrollo; a pesar de los altibajos, el progreso en Latinoamérica ha sido positivo y creciente.

Es evidente que si se comparan Estados Unidos, China, Corea del Sur y algunos países europeos, el crecimiento económico ha sido muy superior al de América Latina, pero debe reconocerse que en esta región ha habido avances importantes. En los capítulos del libro también se admite que ha persistido una inestabilidad económica y, por tanto, crisis significativas y recurrentes que han frenado el desarrollo de la zona.

Antes de los años 80 del siglo pasado en México se trabajaba con un programa de crecimiento hacia adentro, con la sustitución de importaciones por la producción nacional de las necesidades. Ahora se evidencia que el comercio es mutuamente beneficioso, tanto para el importador, como para el exportador. En la actualidad el crecimiento está basado en las exportaciones y en otro tipo de modelo, en parte controlado por el Estado, como es el sector turístico.

Las diversas crisis que comenzaron en el país en 1982 con la moratoria hacia la banca internacional hicieron ver las debilidades de los modelos de crecimiento, situación que se agravó por los altos montos de la deuda externa de las naciones latinoamericanas, cuyo comercio exterior dependía de las materias primas; 40 años después, eso mismo es lo que se sigue exportando.

Pierre Salama habló sobre el declive que ha vivido Argentina en los últimos años, y advirtió que fue el país más rico de América Latina en el siglo pasado, con un PIB similar al de Japón, pero ahora es uno de los peores de la región.

El Doctor Honoris Causa por la UAM y la Universidad de Guadalajara aseguró que es el país con más volatilidad en toda Latinoamérica y muestra que no tiene la capacidad de resolver sus problemas de inflación, lo que va a representar una gran dificultad para recuperar su nivel de crecimiento, lo que conlleva un problema de pobreza creciente.

Vidal Ibarra Puig, investigador del Departamento de Economía de la Unidad Azcapotzalco, afirmó que la obra que coordina ofrece aportes fundamentales para futuros proyectos de investigación por sus contenidos heterogéneos y está pensada para los estudiantes, pues si bien contiene textos especializados, la manera de abordarlos permite su comprensión, ya que no hay complejidad teórica.